Respuesta: La electricidad puede calentar una superficie de metal mediante un proceso llamado resistencia eléctrica. Cuando una corriente eléctrica pasa a través de un conductor metálico, como un alambre o una placa, los electrones, que son las partículas cargadas negativamente que permiten la corriente eléctrica, se mueven a través de la red de átomos de metal.
A medida que estos electrones se mueven, chocan con los átomos de metal, lo que provoca fricción. Como resultado de esta fricción, se genera calor. Este es el mismo concepto que cuando frotas rápidamente tus manos una contra la otra, generas calor a través de la fricción.
Este proceso de calentamiento es la base del funcionamiento de muchos electrodomésticos como tostadoras, calentadores eléctricos, hornos y placas de inducción, entre otros. El metal se utiliza a menudo en estos dispositivos debido a su alta conductividad térmica, lo que significa que es muy eficaz para transferir el calor generado en toda la superficie de metal.