Respuesta: La educación popular se fundamenta en mejorar la vida de las personas a través de una enseñanza inclusiva y participativa. Esta perspectiva educativa busca democratizar el conocimiento, empoderar a las comunidades marginadas y fomentar cambios sociales positivos.
En conclusión, la educación popular es esencial para construir sociedades más justas, equitativas y democráticas. Ofrece a las personas herramientas para evaluar críticamente su realidad, cuestionar el statu quo y participar activamente en la transformación de su sociedad. Promueve la educación no sólo como un derecho, sino también como medio para la liberación y la transformación social. Por todo ello, es crucial seguir defendiendo y desarrollando este enfoque pedagógico.